Durante el último mes del 2022 se registró un mojón en lo que va a ser un salto competitivo de la cadena forestal uruguaya. Fue en ese mes que se registraron los primeros movimientos de madera rolliza de eucalyptus hacia la Zona Franca Durazno, lugar donde operará la tercera planta de celulosa ubicada en Uruguay y segunda planta del gigante finlandés, UPM.
Según la información de Aduanas ingresaron 57 mil metros cúbicos por un valor aproximado de US$ 3,4 millones. Está madera tendrá como finalidad abastecer la producción de la nueva planta, cuyo comienzo de operaciones esta planificado para el primer trimestre de este año.
Se espera que con la producción que sumará esta planta, cuando se encuentre operativa a capacidad plena, Uruguay se posicione como uno de los principales productores de celulosa de fibra corta, tomando una relevancia mayor en el comercio internacional de este commodity.