La Unión Europea ha resistido los pedidos de algunas industrias y países de aplazar su política emblemática para luchar contra la deforestación, según mostró una carta reciente.
El gobierno estadounidense y grupos industriales, incluida la Confederación de Industrias Papeleras Europeas (CEPI), quieren que se aplace la política, citando quejas como la de que los sistemas de la UE para gestionar la prohibición aún no están terminados.
En una carta a los miembros de la CEPI, el Comisario Europeo de Medio Ambiente, Virginijus Sinkevicius, reconoció esas preocupaciones, pero no dio ninguna indicación de que Bruselas estuviera considerando un aplazamiento.
“Estamos recibiendo comentarios de algunas partes interesadas que indican que la preparación para la implementación puede ser un desafío. Sin embargo, también vemos señales alentadoras en muchos sectores y países que trabajan para alinearse con los requisitos del EUDR (Reglamento de Deforestación de la UE)”, decía la carta.
La política ha dividido a los legisladores y países de la UE, y algunos apoyan un retraso, incluso después de que aprobaron la ley el año pasado con un amplio apoyo de la mayoría.
El ministro de Medio Ambiente de Dinamarca, Magnus Heunicke, escribió recientemente a la Comisión Europea instándola a no posponer la primera política ambiental del mundo, aunque instó a Bruselas a terminar rápidamente los sistemas técnicos necesarios para lanzarla.
“Estamos convencidos de que esta regulación supondrá un auténtico cambio en la lucha mundial contra la deforestación”, dijo Heunicke en la carta.